1. El agua se puede beber directamente.
2. té
Después de servirlo, deje que el té se enfríe por debajo de los 42 °C y luego revitalícelo con jugo de limón o miel. Así preparado, cuenta como parte de la cantidad potable con agua revitalizada.
3. Enriquecimiento con productos naturales
Para esta elaboración, los siguientes productos naturales deben dejarse en remojo en agua durante al menos 6 horas para revitalizar el agua.
- Trozos de frutas y verduras, p. Por ejemplo, rodajas de manzana, rodajas de pepino.
- fruta blanda
- Hierbas
4. Té de sol
Para esta revitalización se coloca agua y melisa fresca en una jarra de cristal y se carga directamente al sol durante unas horas. El sol extrae los poderes curativos del toronjil y los hace aún más potentes.
Los jugos frescos cuentan para la cantidad de agua revitalizada.
También incluye zumos puros de frutas y verduras recién exprimidos, p. b.
- jugo de apio
- jugo de pepino
- jugo de melón
- y mucho más
5. Agua ligera
“Enriquecer el agua potable con luz curativa tiene un efecto muy aliviante y de apoyo en los trastornos de la tiroides. Sírvete un vaso de agua y colócalo frente a ti. Ahora levanta un puño por encima de tu cabeza para visualizarlo llenándose de luz. Abra la mano sobre el vaso hacia el agua y diga “Luz”, mientras imagina la luz fluyendo hacia el agua. Recoge la luz nuevamente con el puño y suéltala en el agua mientras dices “luz”. Es mejor hacerlo todo siete veces. Los ángeles que te rodean saben lo que estás haciendo y están apoyando la ‘exposición’ del agua”.
Con cada uso posterior, la luz suministra energía curativa al agua, cambiando su estructura para que se convierta en un elixir divino de transformación. Para la tiroides, haz gárgaras con el agua antes de tragarla. Imagine visualmente la luz del agua fluyendo hacia la tiroides, matando los virus de Epstein-Barr que atacan la tiroides y reparando el daño tisular. […]
Esta agua, ya sea que la hayas empapado con luz o la hayas obtenido de otra persona, es como una amorosa capa protectora para tu tiroides. La luz también estimula el propio sistema inmunológico de la tiroides, es decir, sus linfocitos especiales, y actúa como una especie de cargador de batería para la glándula”.
Cita de sana tu tiroides Página 264